En desarrollo del Acuerdo Distrital 056 de 11 de mayo de 2021, a través de cual se implementaron en el Distrito de Cartagena las denominadas Zonas de Estacionamiento Regulado –ZER-, el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte – DATT – abrió el Concurso de Méritos No. CM-DATT-UAC-027-2022, con el objeto de escoger al consultor para la “Elaboración de estudios técnicos, financieros y legales para la implementación del sistema de estacionamientos públicos en vía y fuera de vía, en el Distrito Turístico y Cultural de Cartagena de Indias”.
Sobre este proceso tenemos dos observaciones: la primera, referente al proceso de estructuración para la selección del contratista; y la segunda, en cuanto al alcance del estudio que se procura mediante este concurso de méritos.
Compartimos la preocupación con quienes han formulado observaciones al concurso de méritos porque, extrañamente, en la ‘Administración de la Transparencia’, regida por el servidor público más pulcro de Colombia, William Dau Chamatt, el proceso de selección haya optado por dejar de lado los pliegos tipo, al cual por Ley está obligado, para recurrir a las viejas triquiñuelas de colocar experiencias específicas al director del proyecto a contratar, y de algunos profesionales que solo una o dos personas en Colombia y en el mundo cumplirían. (Consultar ‘Términos de Referencia, numerales, 3.1.1 director de consultoría y 2.4.3.4.1. especialista en tránsito’).
A manera de ejemplo, se toma la observación formulada por el oferente ‘Movilidad Sostenible’:
Dejémonos de vainas y digámonos las cosas sin eufemismos: una exigencia de este tipo para el director del proyecto y el especialista en transporte para ejecutar el contrato en la Costa Atlántica y, además, que se exija título de maestría o doctorado, sin discusión alguna tiene nombres propios.
Dentro del alcance de la consultoría podemos observar también que están incluidas como Zonas de Estacionamiento Regulado las vías barriales y el espacio público. A este tema nos referimos ampliamente en nuestro artículo ‘Estacionamiento en las vías públicas: ¿solución o problema?‘ (hacer click).
No se puede perder, desde ningún punto de vista, que las vías y los espacios públicos, jamás se pueden ocupar de forma permanente, con carácter exclusivo y excluyente.
Las ZER, en todas partes del mundo, simplemente son estacionamientos públicos provisionales, temporales y aleatorios, para quienes lo requieran dentro del devenir de las actividades económicas de una ciudad. Qué tal que los dueños de establecimientos de comercio o institucionales paguen permanentemente por mantener sus vehículos o los de sus clientes estacionados al frente de sus negocios.
Pero la cosa se tornaría mucho más compleja en los barrios. Tomemos como ejemplo Manga, e imaginémonos que los vecinos paguen por mantener sus vehículos estacionados frente de sus residencias, u ocupen el frente del vecino, quien, por no tener un vehículo en su hogar, debe aceptar que se le perturbe su frente porque alguien ha pagado al Distrito una módica suma de dinero.
Existen propuestas más audaces que permitirían la entrada de muchos más recursos al Distrito sin destruir su movilidad y su perfil urbano. Ya hemos dado bastantes soluciones para el tema de la movilidad y el sistema de transporte masivo.
Otro camino a explorar es el de procurar asociaciones público-privadas para que, en aquellos barrios con tratamiento de renovación urbana, se construyan edificios de parqueaderos en altura. Un buen ejemplo sería Bocagrande.
Ese sector urbanísticamente deteriorado, donde se localizan los Sanandresitos, bien podría transformarse arquitectónicamente para que en el primer piso se reubiquen los locales comerciales y se construyan 20 pisos de parqueaderos. Esto nos permitiría liberar toda la zona de playa y comercial de Bocagrande de los incómodos parqueos de vehículos sobre las vías principales y al frente de los establecimientos de comercio.
Pero el caso de estas ZER se tornan mucho más complejas de aplicar y reglamentar, en tratándose de ordenar estacionamiento de vehículos en los espacios públicos, en una ciudad con un déficit de espacio público y zonas verdes aterrador: